VIII Ciclo de Cine “La química en nuestras vidas” – 2018
La Química nos infunde respeto y miedo. Sin embargo, es una de las tres Ciencias Básicas que sostienen todo el entramado del conocimiento humano, junto a La Física y las Matemáticas.
La Física estudia las propiedades y el comportamiento de la energía, la materia, el tiempo y el espacio. Las Matemáticas, partiendo de axiomas y siguiendo el razonamiento lógico, estudia propiedades y relaciones entre entidades abstractas como son números, figuras geométricas y símbolos.
La Química, a su vez, estudia la composición, estructura y propiedades de la materia, sus cambios en las reacciones químicas y su relación con la energía.
A partir de aquí estas ciencias desarrollan teorías científicas y predicciones que no intentan investigar dónde se pueden aplicar, esta no es su labor. Pero sí en utilizar estas teorías, para responder a los interrogantes y fenómenos desconocidos que se producen continuamente en los laboratorios de investigación aplicada.
Sus descubrimientos como Ciencias Básicas no llevan a fines prácticos inmediatos, sino a incrementar los conocimientos. Sin ellas sería imposible dar soluciones a ninguno de problemas reales del mundo en que vivimos. La relación entre la Ciencia Básica y la Ciencia Aplicada es crucial para la interrelación entre la I+D+I, la Tecnología y la Sociedad.
Las proyecciones de este ciclo las relacionamos con tres temas de total
actualidad:
- Cosmética.
- Alimentación.
- Drogas.
Desde los albores de la humanidad 4000 años A.C. se vienen utilizando productos cosméticos para la higiene corporal o mejorar la apariencia. Son mezclas de compuestos químicos, algunos derivados de fuentes naturales pero la gran mayoría sintéticos. El ácido hialurónico es un polisacárido que, en el campo del envejecimiento natural, tiene un gran efecto temporal positivo, además de otros numerosos usos médicos.
La toxina botulínica es una proteína cuya fórmula química posee átomos de carbono, hidrogeno, nitrógeno y oxígeno. Es una de las toxinas más potentes y extremadamente peligrosas que existen como arma bélica. La marca comercial registrada más conocida en su aplicación cosmética es Botox que se emplea casi como nombre genérico, en similitud a otras presentaciones comerciales.
En el segundo tema queremos incidir en la química y su extraordinaria aportación a la alimentación en el mundo. Un campo tratado con productos químicos puede generar hasta diez veces más alimentos que uno donde no se empleen, mejorando el rendimiento de las cosechas y protegiendo los cultivos de plagas y agentes nocivos.
Finalmente, en el tercer film nos aproximamos a las drogas. Al sufrimiento que genera el consumo de este tipo de substancias químicas desde que se pasó a un uso indiscriminado, sin calibrar sus adicciones. También es verdadera química, la separación y síntesis de las cada vez más potentes fórmulas de enajenación artificial. Nada que ver con las bajas dosis naturales de las civilizaciones indígenas ancestrales. Una vez más, el libre albedrio del hombre utiliza el avance de la ciencia para el bien o el mal.