El perfume

Temática: Esencias y perfumes

Año: 2006

Director: Tom Tykwer

Reparto

Ben Whishaw, Alan Rickman, Rachel Hurd-Wood, Dustin Hoffman, Sara Forestier, Karoline Herfurth

Sinopsis

Jean Baptiste Grenouille nació en medio del hedor de los restos de pescado de un mercado y fue abandonado por su madre en la basura. Las autoridades se hicieron cargo de él y lo mandaron a un hospicio. Creció en un ambiente hostil; nadie le quería, porque habla en él algo excepcional: carecía por completo de olor, Estaba, sin embargo dotado de un extraordinario sentido del olfato. A los veinte años, después de trabajar en una curtiduría, consiguió trabajo en casa del perfumista Bandini, que le enseño a destilar esencias. Pero él vivía obsesionado con la idea de atrapar otros olores: el olor del cristal, del cobre, pera, sobre todo, el olor de algunas mujeres.

Química y Sociedad

La química está presente en todo nuestro entorno, en las cosas que vemos, que olemos o que tocamos. El simple gesto de ponernos un jabón durante el baño, una crema para hidratar la piel, o una colonia para perfumarnos es el resultado de aplicar la química a nuestra vida cotidiana. Y es que la industria cosmética está estrechamente ligada con los procesos químicos, procesos que permiten crear infinidad de productos a partir de las materias primas naturales como los perfumes.

El perfume nació en la antigüedad. Los productos aromáticos, aceites, flores y resinas se utilizaban como ofrenda a los dioses de todas las civilizaciones antiguas, los romanos lo popularizaron y los griegos combatían con ellos ciertas las enfermedades. En la Edad Media se empleaban para luchar contra epidemias. Un paso importante lo dio la civilización árabe que con la alquimia experimentaron con plantas para extraerles sus propiedades. La industria del perfume nace en el año 1200 cuando se reconoce la profesión del perfumista en Francia, se crean escuelas y con ellas técnicas como el prensado de pétalos, la maceración de flores o la mezcla de ingredientes.

En el Renacimiento los avances de la Química permiten perfeccionar sus técnicas y la extracción del perfume, mediante la destilación con ella se logran separar las partes volátiles y las menos volátiles de las plantas, para obtener productos con mayor o menor calidad. Más adelante las síntesis permite reproducir los olores naturales y los no naturales. Estos últimos cuentan con ventajas imprescindibles, son más económicos menos volátiles, más estables y duraderos algo perseguido por los perfumistas desde siempre. Las técnicas de extracción del perfume son variadas y la alquímica ha posibilitado la existencia de las mismas y su perfeccionamiento. Así nos encontramos la maceración mediante la cual se cuecen grasas animales y se añaden flores, las grasas absorben el aroma que solidifican y cuando se retiran se queda aislado el aceite que contiene el aroma. Con la técnica de la destilación se tratan flores hojas, madera, raíces con vapor de agua. Al tener distinta densidad cuando se retira el agua el resultado es el aceite esencial.

Los aceites más delicados se extraen a través de la técnica de los disolventes volátiles. La planta se macera con petróleo o benzol, la esencia se disuelve y el disolvente se elimina por evaporación. Las ceras se eliminan con alcohol de baja graduación y una vez evaporado el aceite resultante es altamente concentrado y apreciado. La técnica de la compresión se usa con los cítricos que acaban liberando la esencia que contienen. La exudación, es otro la técnica empleada con las resinas tratadas con alcoholes.

La cantidad de esencia empleada en una fórmula para fabricar un perfume determina la calidad del mismo. Así cuando la concentración de esencias del 40% en relación a la cantidad de alcohol hablamos de extracto, es la más cara y suele presentarse como crema. Con un 20% de concentración hablamos de Agua de Perfume. Un 10%, agua de toilette y agua de colonia cuando la esencia no supera el 5% de producto. Para realizar un perfume, la elección de las materias primas es lo primero y más importante. Existen infinidad de ellas pero se pueden dividir en dos grupos los productos naturales y los sintéticos.

Dentro de los naturales están los vegetales, los animales y los minerales.

Los productos sintéticos son los conseguidos mediante reacciones químicas reproduce los aromas naturales con un resultado sorprendente casi perfecto y son mucho más baratos. Algunos como la vainilla o la Rosa óxido tiene su origen en la naturaleza pero otros, han nacido de la imaginación de los químicos basándose en substancias como el Benzaldehio, los hidrocarburos, los alcoholes, las cetonas, los fenoles y los esteres.

Pero los aromas hay que mezclarlos para conseguir una fórmula que haga único el perfume y esto no se hace al azar hay que mezclar aromas compatibles en su justa medida y hacerlos conjugar en perfecta armonía.

Los avances tecnológicos y en especial la técnica de la cromatografía de gases nos permiten averiguar con exactitud todos los componentes que lleva un perfume, la finalidad ultima de un perfume hoy en día, es disfrutar su aroma.

El olfato es más seguro por las mañanas y hay que aplicarlo en aquellos lugares donde palpita la sangre, cuello, muñeca y tras las orejas, el calor permitirá que el aroma dure más.